ANÁLISIS DEL MEJOR MENSAJE DE NAVIDAD DEL REY FELIPE VI

Un año más, y ya son diez, el rey Felipe VI ha compartido su Mensaje de Navidad.

He analizado todos ellos (más abajo tienes sus respectivos enlaces por si quieres visitarlos), pero este mensaje del año 2024 ha marcado una gran diferencia, desde su comunicación, principalmente no verbal, ha sido el mejor.

Los motivos que me llevan a esta conclusión son los siguientes:

1 – LOS DOS ESCENARIOS: EL CIVIL Y EL NAVIDEÑO

En el primero de ellos vemos al monarca con las banderas de España y Europa detrás de él y, sobre la mesa un ejemplar de la Constitución Española y una foto de las personas, militares y civiles, que ayudaron tras la devastación de la dana.

En el segundo, se centra en el simbolismo navideño: un nacimiento y un árbol de Navidad. No creo que sea casualidad que tras 5 minutos de discurso sin cambiar de plano, cambie a lo navideño justamente cuando se dispone a hablar de la inmigración. ¿Se está queriendo “tocar” el lado más humano y familiar al hablar de este asunto? Yo creo que sí.

El cambio de escenarios me parece un acierto dado que hace cambiante el discurso y, por ello, mas fácil de quedarse viéndolo y no ponerse a hacer otra cosa.

2 – EL ROSTRO TRANSMITE EMOCIONES

Siempre es importante que en la cara se activen los músculos que exteriorizan emociones y que estas sean coherentes con el contenido del mensaje. La emoción más repetida ha sido la de la tristeza, sobre todo al referirse a los efectos de la dana.

3 – ENFATIZA LEVANTANDO CEJAS

Las personas, cuando decimos algo que le damos mucha importancia, solemos levantar las cejas a la vez. Sería como poner negrita o subrayado a un texto.

Algunos de los ejemplos son:

“La terrible dana que golpeó con INUSUAL fuerza”

Al recordad la ayuda de las Fuerzas Armadas

Pese a las cifras de paro juvenil.

4 – BUENA GESTUALIDAD DE MANOS

Qué bien ha ido acompañando su discurso con el movimiento de sus manos.

Este tipo de comunicación es una señal de coherencia e implicación con lo que se cuenta.

5 – EL RECUERDO VISUAL A LA FAMILIA REAL

Pensaba antes de ver este discurso que habría alguna foto de la Familia Real o, al menos de la sucesora al trono, la princesa Leonor. Pero no ha sido así, ha querido que la única imagen que le acompañe esté dedicada a la ayuda por la dana.

La familia sí aparece en el mensaje navideño tras acabar el discurso. Los cuatro al aire libre, lejos del interior de palacio. Parece claro que quieren mostrarse alegres, unidos y cercanos a los ciudadanos

6 – BUEN USO DE LA PRIMERA PERSONA DEL SINGULAR

Otra pista más de implicación personal es utilizar la primera persona del singular, no generaliza que sería una señal de poco compromiso, lanza una prueba de que es él personalmente quien habla por sí mismo.

Algunos ejemplos serían: “Me gustaría volver a repetirlo”, “creo sinceramente” o “vuelvo al principio” entre otros.

7 – MAGNÍFICO DISCURSO CIRCULAR

Comienza y termina hablando sobre los afectados, voluntarios, ayudas… por la dana. Le queda… «redondo».

EN CONCLUSIÓN

Un discurso en el que he visto al rey Felipe VI muy cómodo dado que ha abandonado algunos gestos artificiales de años anteriores, contundente y convencido de lo que ha expresado.

Para quienes pudieran pensar que solo estamos ante un buen profesional de la comunicación, que todo está ensayado y que solo es buen “actor”, no estoy de acuerdo, dado que otros años en este mismo discurso o en otros diversos no le he visto tan comprometidos mente y cuerpo.

ENLACE AL MENSAJE DE NAVIDAD: