Donald Trump se declaró arrepentido de las palabras hirientes que ha pronunciado durante la campaña electoral.
«A veces, en el fragor del debate y hablando sobre una gran variedad de temas, no se escogen las palabras correctas y se dicen cosas equivocadas», señaló Trump durante un acto en Carolina del Norte.
Pero… ¿su comportamiento fue congruente con el arrepentimiento?
Cuando una persona se arrepiente ante otros, sería normal observar unas características a nivel no verbal:
– Unos GESTOS nunca agresivos. Extraña ver el dedo índice estirado, conocido como dedo acusador.
– POSICIÓN CORPORAL más encogida que expansiva, se tiende a ocupar un espacio más reducido dado que trata de «desaparecer» ante la desagradable situación que está viviendo.
– La MIRADA tiende a orientarse hacia abajo, como distante, nunca altiva. La vergüenza y/o la culpa le impiden una mirada directa prolongada.
– El ROSTRO debería exteriorizar tristeza, que se caracteriza por colocarse las cejas en V invertida, pudiendo ver también la barbilla ascendente y los labios por sus laterales descendentes. Nunca una sonrisa.
Ahora pueden ver el momento de ese pronunciado arrepentimiento y juzgar por ustedes mismos: