LOS REYES EN PAIPORTA: ANÁLISIS DESDE LA COMUNICACIÓN NO VERBAL

Lo primero y más importante: Mi cariño y solidaridad con todas las personas que esta semana han sufrido en sus vidas el paso de una dana cuyos efectos han sido devastadores.

Hoy han visitado los reyes de España, Pedro Sánchez y Carlos Mazón un pueblo que se ha visto arrasado por este dana.

Las imágenes de un pueblo indignado van a dar la vuelta al mundo: les han lanzado objetos, barro e insultos.

A los únicos que he visto con determinación seguir caminando hacia delante ha sido a los reyes Felipe y Letizia. Por este motivo, es a los únicos que voy a analizar.

¿Qué ha expresado y que no su comunicación no verbal?

1 – NUNCA HE VISTO IRA: Las microexpresiones faciales, como la de la ira, son imposibles de frenar por mucho que se sea rey, reina o se haya recibido formación. Estallan desde el lado más emocional de nuestro cerebro y la parte más racional llega tarde para frenarlas. No les he visto enfadados.

    2 – TAMPOCO HE ADVERTIDO ASCO: En contra de lo que alguna persona me ha indicado en redes sociales al ver a la reina tocarse la zona de la nariz. Podría venir motivado por el «bolazo» de barro que ha recibido en esa misma zona o también tratase de un gesto auto manipulador generado por estrés cerebral. Microexpresión de asco no he visto ninguna.

    3 – GESTOS DE CERCANÍA Y CARIÑO: De estos ha habido muchos, con abrazos principalmente y mucho contacto físico. Donde no llegan las palabras lo hace el tacto.

    4 – MIRADAS DIRECTAS: El rey Felipe sí ha mirado mucho a los ojos a las personas que se dirigían a él, transmitiendo siempre mucha seguridad y nada de temor o vergüenza. La reina Letizia lo hacía de vez en cuando; estas miradas las ha intercalado con miradas bajas propias de tristeza en este contexto.

    5 – SIEMPRE HACIA LA GENTE: No les he visto retroceder ni tratar de evitar lo que les tiraban. Incluso en algún instante, el rey Felipe parecía incluso querer apartar el paraguas con que una persona de su seguridad le estaba protegiendo. Se podrá estar a favor o en contra de su labor, pero es indiscutible que no se han marchado al escuchar los insultos, al lanzarles objetos, ni siquiera al recibir la reina en plena cara un pedazo de barro que le han arrojado.

    Incluso he visto cómo, a quienes gritaban, el rey Felipe, con un gesto de su mano, les pedía que fueran hacia él a expresarle lo que quisieran.

    6 – GESTOS DE EMPATÍA Y EMOCIÓN: Principalmente en la reina Letizia, a quien he advertido muy afectada por las experiencias que escuchaba, incluso se llega a coger a sí misma las manos como tratándose de dar consuelo a ella misma por lo que sentía en esos instantes.

    7 – LOS GESTOS ILUSTRADORES DE LAS MANOS: Propios de quien se está implicando mucho en aquello que expresa. También más frecuentes en la reina.

    Por si os preguntáis por qué no analizo a Pedro Sánchez o a Carlos Mazón, se debe a que el primero se ha marchado del lugar inmediatamente y, al segundo, porque le he visto poco y detrás del rey Felipe.

    EN CONCLUSIÓN

    Hay que estar en la piel de los habitantes de estos pueblos para entender cómo deben de sentirse. Yo, por mucho que lo intente, ni me acerco.

    Considero que, desde un punto de vista de la comunicación, los reyes de España han tenido un comportamiento no solo cercano y muy humano, sino incluso valiente, porque lo fácil habría sido volver a su coche oficial y salir de allí cuanto antes. No solo no han querido hacerlo, sino que han tratado de hacer sentir, en la medida de sus posibilidades, que les escuchan, les entienden y les acompañan en estos duros momentos.

    10 comentarios

    1. Esto es lo que le diría al rey si pudiera:

      FELIPE, eres capitán general de las FAS por algo y para algo,  

      no de adorno. Tenías que haber dado un golpe en la mesa,  

      y haberte impuesto con autoridad, liberando al ejército, para  

      que vinieran a ayudar con todas sus ganas y sus medios.  

      Un mínimo de carácter y valentía es imprescindible para  

      defender AL PUEBLO, del que vivís todos estupendamente,  

      y del que depende el futuro de tus hijas.  

      Para ser rey no se puede ser ni masón, ni pusilánime, y hay  

      que estar con el pueblo siempre, sobre todo en sus peores  

      momentos y «desde el minuto uno», y no solo en apariencia,  

      sino de todo corazón: en cuerpo y alma.  

      Primero Dios luego el PUEBLO y después la familia.  

      Por encima del PUEBLO solo DIOS.   

      Los políticos en último lugar y siempre bajo sospecha,  

      (pues el poder corrompe).  

      Así es un Rey del PUEBLO y para el PUEBLO.  

      Si no es así, mejor nada, ni monarquía, ni república, ni nada.  

      Nos sobra todo, empezando por los políticos.  

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    2. Lo más admirable es la gente de Valencia / Paiporta y como los reyes la conocen : ultra pacíficas. Tanto como para que los reyes sepan que a pesar del dolor y la indignación, la cercanía no suponía ningún peligro, más allá de un poco de barro.

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