Como esta es mi página y este mi análisis, comienzo sin analizar nada, prefiero mejor empezar felicitando a todas las que os llamáis Pilar. Y dicho esto, al lío…
Hay SEIS MOMENTOS de esta conmemoración del Día de la Hispanidad que, desde la óptica de la Comunicación No Verbal, me han llamado la atención:
EL HOMBRE QUE HIZO ESPERAR A UN REY: Pedro Sánchez podrá contar a sus nietos que él hizo esperar a los Reyes de España; «para que veáis lo importante que era el abuelo» -les podría decir- Aunque parece que, en realidad, esa demora podría venir motivada para no tener que esperar al Rey, durante unos interminables segundos para él, escuchando los abucheos del público asistente.
Esta situación podría considerarse no solo una falta de respeto hacia el Jefe del Estado, sino también tomado muy a mal por el estamento militar, dado que los militares llevan la puntualidad en su ADN.
Compartiré contigo mi propia experiencia: Hace un par de días impartí un curso en la Escuela de Guerra del Ejército de Tierra de España, donde soy profesor. A los alumnos les pedí acortar el descanso. Exactamente a la hora que les dije estaban todos sentados y en silencio esperando a que retomara mi curso. ¡IMPRESIONANTE! Esto no me ha pasado en ninguna otra clase.
Cuando se es tan puntual gusta que los demás lo sean también. Y aquí Pedro Sánchez no lo ha sido.
SÁNCHEZ SE ESPERABA LOS ABUCHEOS: Si le hubieran sorprendido y, como es lógico incomodado, habría podido ver en su rostro enfado, tristeza, desprecio… Pues no he visto nada, algo propio de quien lo que vive no le extraña y no le impacta emocionalmente. Lo cual no quiere decir que le gustara, por supuesto.
DE LA FRÍA FORMALIDAD A LA CÁLIDA HUMANIDAD: El momento más entrañable que he observado ha sido cuando, tras concluir el desfile y nada más bajarse de la tribuna, la Infanta Sofía ha buscado la cercanía de su madre la Reina Letizia y le ha cogido de la mano. Así han estado unos segundos hasta que, tras soltarse, la madre ha agarrado la cintura de su hija.
AYUSO SUPERSTAR: La Presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha llegado al acto y no ha decidido irse con las autoridades, sino que ha elegido aproximarse al público asistente, charlar con ellos e incluso cogerles el teléfono móvil y hacerse varios selfis. Ha transmitido mucha cercanía y parecía toda una estrella del cine reclamada por sus fans.
SALUDO PROPIO DE LA PANDEMIA: Vamos a ver, si ya la distancia social de la pandemia está superada ¿por qué Ayuso y Margarita Robles se han saludado con tanto distanciamiento? Que parece que se fueran a contagiar cualquier virus… Creo que su relación, en estos instantes, no pasa por su momento más cercano.
«QUÉ COSITAS ME DICE«: Algo parecido a esto ha debido pensar Yolanda Díaz tras saludar a la Reina Letizia. He observado como Díaz, tras el protocolario saludo, ha vuelto con rapidez la cabeza hacia la reina y se ha alegrado mucho. Creo que le ha podido decir algo como… «pero que vestido más bonito llevas» o «qué bien te veo». Su reacción de satisfacción ha sido patente.
En conclusión: que sí que sí, que mucho protocolo y mucha formalidad, pero al final, lo humano manda.
José Luis Martín Ovejero 
Buen análisis.
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Para analizar la comunicación no verbal también debería aplicar la equidistancia con las propias ideologías y procurar ser menos sesgado, más igualitario.
Ej. Y basándome en sus propias enseñanzas, el gesto de Sánchez podía interpretarse como empatía y serenidad con los que no están de acuerdo en cómo gobierna y el comentario entre Leticia y Díaz podía ser “suerte con su nuevo proyecto”, no necesariamente “qué guapi”
Y, el presidente del gobierno, es un civil elegido democráticamente, no le viene el cargo por su nacimiento , ni está formado en academias militares, que tienen otros fines.
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Doña Concha, no v eo la empatía por ningún sitio, y creo, por lo mucho que he leído a Sr. Martín Ovejero que si de algo peca es de no decir lo que piensa políticamente, porque da estacazos a diestro y siniestro. La Reina bien pudo decirle a la ministra. «¡¡¡Quién nos ha visto y quién nos ve!!!» (se supoe que la frase fue breve), y es que elucubrar sobre esto me parece una pérdida de tiempo
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Trato de efectuar mis análisis sin contaminaciones ideológicas ni de ningún tipo.
– En cuanto al gesto de Sánchez: Yo solo digo que su rostro no expresa sorpresa, una reacción facial involuntaria ante un evento exterior que resulta inesperado. Esa emoción no la advierto. A partir de ahí llegan las interpretaciones subjetivas como la que haces y que puede ser acertada o no serlo.
– Respecto al comentario de Letizia a Díaz:
a) La Casa Real no debe desear suerte a ningún proyecto político dado que rompería el principio de su distanciamiento con cualquier proyecto político. Por lo que esa hipótesis la veo difícil.
b) En segundo lugar, ni la propia Yolanda Díaz ha manifestado que se vaya a presentar a próximas elecciones con «SUMAR», por lo que resulta extraño que le vaya a desear suerte sobre un proyecto aún no concreto.
c) Y, en tercer lugar, esa reacción de felicidad de Díaz parece la reacción a algo muy personal más que profesional.
Como ves, me puedo confundir como cualquiera, pero trato de hacer mis análisis desde la objetividad.
Un saludo y gracias por tu opinión
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