Giorgia Meloni será, seguramente, la próxima primera ministra italiana.
Pocos casos he visto de tanta transformación comunicativa, pasando de una explosiva exteriorización de sus emociones en los actos públicos, a mostrase como una persona muy contenida dando un comunicado en su despacho, a una tímida y nerviosa ganadora de las elecciones.
Las personas y, por supuesto los profesionales de la política, cambiamos nuestro comportamiento y comunicación dependiendo de la situación en la que nos encontremos. No obstante, siempre la esencia de lo que somos está presente. Eso… es normal.
Lo que no resulta tan normal es el caso de la protagonista que hoy analizo, que parece que estuviera observando a personas diferentes.
Vean las siguientes fotos y lo comprobarán ustedes mismos. Yo me he visto los vídeos, por supuesto.


Rostro muy activo con gran expresión de emociones; gestualidad agresiva, por ejemplo con su dedo índice; habla utilizando golpes de voz e incluso alzándola con los contenidos que más desea destacar. Sabe tocar y contagiar las emociones.


Erguida sobre la mesa, inclinación corporal adelantada y casi nula gestualidad, incluso con sus manos aferradas o en contacto una con otra. Muy contenida y autocontrolada.


Atada al micrófono y con la otra mano tocándolo por su parte inferior insistentemente, sin emociones desbordadas a pesar de haber vencido. Transmite estrés por nervios o timidez, aunque esta segunda opción casi la descarto a la vista del resto de sus intervenciones.
¿A qué conclusiones llego de lo visto?
- A que se sabe amoldar a las circunstancias requeridas dependiendo de lo que precise el momento: pasa del calor al frío comunicativo con la misma naturalidad que un camaleón se mimetiza con su entorno.
- La veo más cómoda en el terreno ardiente de la pública movilización de masas.
- Se sabe controlar y qué imagen dar dependiendo del auditorio y de lo que la situación requiera.
Si fuera una persona que acabas de conocer te aconsejaría lo siguiente: no te fíes tanto de lo que dice y de cómo lo dice, y espera a comprobar lo que hace.