En la lotería de Navidad de este año 2024 ha saltado la sorpresa cuando una niña ha cantado el premio gordo después de que este premio ya había salido minutos antes y no hay dos premios gordos en el sorteo.
Te muestro el momento por si aún no lo has visto:
La niña canta 4 millones de euros de premio. El interventor que se sienta detrás y que va comprobando cómo se desarrolla el sorteo reacciona facialmente con evidente sorpresa, mira su cara:
Las redes se han llenado de acusaciones de tongo.
Mi opinión es que tongo no ha sido porque no tengo ninguna prueba que lo sustente, pero un simple error tampoco.
La niña realiza un triple acto deliberado:
- Tapa con su mano los alambres porque sabe que va a cantar un premio importante.
- Justifica de inmediato que haya dicho 4 millones de euros: «Es que un chico me ha dicho que cante…» (parece que quiere decir el gordo)
- Repite la justificación sin mostrar duda alguna. Parece convencida de lo que hace.
Además, resulta difícil confundir dos cifras tan diferentes: 1.000 euros y 4 millones de euros. No olvidemos que los niños vienen muy entrenados a este sorteo.
Como detallo en mi segundo libro «MIÉNTEME… SI TE ATREVES» (Aguilar 2021) hay una gran diferencia entre el error y la mentira. Mientras que en el error la persona cree que lo que ha hecho es correcto y en su mente solo existe una realidad (aunque equivocada), en la mentira conviven en la mente de la persona dos realidades: la verdadera y la falsa.
En este caso, la niña dice que el premio es de 1.000 euros, pero que un chico le ha dicho que cante 4 millones de euros. Según sus propias manifestaciones, ella sabe la verdad y decide cantar un premio diferente que le ha dicho un chico.
Por este motivo yo considero que no hay error.
Me tiene intrigado el motivo y aquí hay varias posibilidades:
- Una broma o una mala recomendación de un chico que ella conoce y obedece.
- Una apuesta deportiva online que habría podido hacer ganar bastante dinero a alguien que hubiera apostado a que se producía este error. Me han pasado esta imagen que no he podido comprobar que sea cierta, pero hoy en día las casas de apuestas abren todo tipo de posibilidades.
- O cualquier otra explicación.
Para el futuro sería recomendable que, en un caso como este, se pare el sorteo y, de inmediato, los miembros de la mesa cuya función es verificar la realidad de los premios, comprueben lo que ha sucedido.
Creo también que a la niña se la debería preguntar por ese chico que le ha aconsejado cambiar el premio ordinario por el gordo e iniciar una investigación.
José Luis Martín Ovejero 
Lo de la apuesta llegué a pensarlo yo también. Me ha gustado el análisis.
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