ANÁLISIS DE LA COMUNICACIÓN NO VERBAL DE 2 DISCURSOS MUY LEJANOS

En un análisis de la comunicación verbal y no verbal de ambos candidatos, y sin conocer aún quien vencerá, dado que jugarán más factores, ni quien podrá hacerlo mejor al frente del PP, QUÉ GRANDES DIFERENCIAS COMUNICATIVAS he advertido, han sido como la noche y el día:

SORAYA SÁENZ DE SANTAMARÍA

El discurso de Soraya Sáenz de Santamaría ha estado muy enconrsetado, siempre lo he dicho, Soraya es una gran oradora cuando tiene que luchar (dialécticamente hablando) en un cara a cara más improvisado, pero la preparación y su esclavitud al papel es su mayor enemigo, la quitan fuerza comunicativa, llega menos a quienes la escuchan.

Las notas características, desde mi punto de vista han sido las siguientes:

• Emoción más repetida la ira. No olvidemos que las emociones se contagian. También ha expresado corporalmente inclinación de cabeza de orgullo.

 

 

• Solo han existido sonrisas claras cuando, tras su discurso, leía los miembros de su equipo. Aquí ya la hemos visto mucho más relajada.

 

 

• Muy muy tensa corporalmente. Era consciente que se la jugaba y eso la ha mantenido en exceso rígida.

 

• Casi nula gestualidad, se aferraba con ambas manos al atril. Grave error dado que se convence con todo el cuerpo, la letra sin música llega menos a la parte emocional de la audiencia.

 

• Ha leído tanto que, en muchas ocasiones perdía el contacto visual con quienes debe arrastrar a su lado, lo cual tampoco es bueno.

 

• La lectura tampoco ha sido ágil, al contrario, muy lenta, parecía que estuviera dictando un texto a unos alumnos para que fueran escribiéndolo. Este proceder provoca que su discurso sea mucho más frío artificial.

 

• Lo más positivo cuando ha contado historias personales, momentos en los que se la podía ver más relajada y gesticulando más. Un acierto pues estamos hechos para que nos atrapen las historias.

 

• Bien también el uso del símbolo: abanico que despliega con la bandera española, y es que una imagen vale más que mil palabras. Pero una sonrisita no habría estado mal.

PABLO CASADO

Ahora llega el turno de Pablo Casado. Totalmente diferente, su discurso se ha caracterizado por:

• Comencemos con un gesto divertido. Justo antes de comenzar, lo primero subirse los pantalones, se estaba preparando para su gran momento.

 

• Rostro sonriente desde un principio. Positivo dado que buscamos más la compañía de la persona alegre que de la enfadada. Además, hay investigaciones científicas que concluyen que se asocia la inteligencia a los rostros sonrientes. Transmite mayor seguridad.

 

• Ha jugado con emblemas gestuales muy emocionales como la mano al corazón en varias ocasiones, lo que comunica mayor implicación personal en aquello que expresa.

 

 

• Rica gestualidad de sus manos acompañando su mensaje. Importante comportamiento dado que transmite seguridad en lo que cuenta, que refuerza con sus manos.

 

 

• Unido a lo anterior han sido varios momentos en los que ha transmitido gestos de fuerza, con sus puños cerrados, como cuando ha hablado de la ilusión.

 

• Los papeles han sido un guión, no unas cadenas. Aunque alguien le tendría que enseñar que los folios no se pasan como hace él, se deslizan para evitar ruidos o despistes del público.

 

• Al no depender tanto de los papeles, la mirada la repartía más y mejor entre todo el público, así los involucra en sus mensajes.

 

• Andrea Levy, que ayer vimos bastante ausente en las referencias a Rajoy, hoy estaba aplaudiendo en pie a Casado.

 

Desde el punto de vista de la comunicación en los discursos, ha sido claro vencedor Pablo Casado. 

 

Añadiría incluso que, teniendo en cuenta que PP y Ciudadanos luchan por el mismo electorado,  si yo fuera Rivera preferiría a Soraya, Pablo es mucho más parecido y sus comunicaciones son similares, incluso hasta los gestos apaciguadores ante momentos de tensión son también casi los mismos, pero de éstos ya hablaremos en otro momento.